El abuelo de Lucio Dupuy viene a Neuquén

“En el caso de Lucio fallaron todos los organismos”, lamentó Ramón Dupuy, el abuelo de Lucio, el chiquito que cuando apenas tenía 5 años de edad fue abusado y asesinado por su progenitora y por la pareja de esta (ambas condenadas a prisión perpetua), en la provincia de La Pampa.
El abuelo hizo estas declaraciones durante una entrevista con el programa Así Estamos -de Radio Mitre Patagonia- donde, tras lamentar la pérdida irreparable, aseguró que la llamada Ley Lucio “viene con todas las herramientas, para que no vuelva suceder lo que le sucedió a Lucio, aunque sabemos que solo con una ley no alcanza”. Dicha norma obliga a realizar cursos sobre los Derechos del Niño a funcionarios y actores de los distintos organismos del Estado.
El abuelo de Lucio vendrá a la región, y la ONG Padres de Río Negro y Neuquén invitó a la toda la comunidad a escucharlo. El 29 de mayo estará en Bariloche y el 31 del mismo mes expondrá tanto en el Concejo Deliberante de Neuquén como en la Legislatura provincial.
“La Ley Lucio trae una de las herramientas que es la capacitación para los tres poderes, pero fundamentalmente a los jueces que cometen errores atroces que perjudican a los niños”, dijo el abuelo que considera a la jueza de Familia y del Menor de General Pico (La Pampa), Ana Clara Pérez Ballester, “la tercera asesina”.
Es que Lucio estaba al cuidado de su familia paterna y llevaba una vida feliz, como la de cualquier otro niño, hasta que esta magistrada ordenó que volviera con quien lo había abandonado: su progenitora. Ahí comenzó el infierno para el chiquito y para aquellos que lo amaban y ahora lo lloran.
La jueza no constató o se desentendió de los peligros a los que exponía a Lucio. Aquí, en Neuquén, el grupo de padres que convoca a la charla lucha contra los jueces y juezas del fuero de Familia que cortan el sagrado vínculo entre padres e hijos ni bien llega a sus despachos una falsa denuncia de violencia. Jamás las constatan pese a que saben que en la inmensa mayoría de los casos remiten a hechos que jamás existieron.
Ramón contó que su hijo, Christian, el papá de Lucio, padece un infierno. “Está muy afectado, está con tratamientos psiquiátricos y psicológicos, toma 14 pastillas por día, desde hace 3 meses empezó con ataques de pánico muy severos, por eso no lo expongo, soy el papá y pongo el pecho por él”, concluyó.