Planes: nada hay de casual en el ausentismo masivo

Planes: nada hay de casual en el ausentismo masivo
Relevamiento. Las sillas vacías hablan por sí solas
Relevamiento. Las sillas vacías hablan por sí solas

El relevamiento de los beneficiarios de planes sociales no sólo demostró que durante la gestión de Omar Gutiérrez se hicieron las cosas mal, sino que además instaló las sospechas de que hubo intencionalidades. No puede admitirse como casual que en tres ciudades (las más grandes de la provincia) se haya registrado un elevadísimo nivel de ausentismo entre los destinatarios de esa ayuda, que se financia con recursos de todos los neuquinos.

Tenían la obligación de presentarse. Sabían que aquellos que no lo hacían perderían el beneficio y aun así no se presentaron. La conclusión se cae de madura: no se tomaron la molestia de presentarse, porque no tenían forma de justificar esos cobros. 

En Neuquén, el operativo se instaló durante una semana en el estadio Ruca Che y solamente se presentó el 58% del padrón. Luego se trasladó a Plottier, donde apenas concurrió el 28,4% y después a Centenario donde sólo se presentó el 43,4% de los beneficiarios. Contundente, así es la cuestión. Y abre una serie de interrogantes que comenzarán a develarse.

La baja es automática y los que pegaron el faltazo ya se quedarán sin cobrar enero, al tiempo que aquellos que se presentaron serán evaluados con entrecruzamientos de datos. Pero, más allá de eso, corresponde indagar por qué fueron incluidos en los padrones cuando no reunían los requisitos y quienes los inscribieron. Ese es un paso que se dará y que, por supuesto, inquieta a varios.

La lupa está puesta sobre un circuito corrupto que tuvo intermediarios (propios, pero también extraños) y que tiene como reo al ex director de Planes del entonces ministerio de Desarrollo Social, Ricardo Soiza, preso (con prisión preventiva) como uno de los presuntos cabecillas de una supuesta banda de delincuentes que perpetró una estafa multimillonaria contra la provincia de Neuquén.

Hasta que desembarcó el gobierno de Rolando Figueroa y desplegó sus políticas de austeridad y cuidado de los recursos del Estado, el asunto este de los planes fue escandaloso. A punto tal que hasta hubo empleados de la administración pública provincial que cobraron dichos beneficios.

Con las denuncias y acciones que vendrán para que rindan cuentas y devuelvan el dinero mal habido se cerrará una etapa de manejos de fondos para cuestiones electorales y de enriquecimientos muy difíciles de explicar. De hecho, Soiza no pudo.

El camino hacia la transparencia y la conversión de los planes en capacitaciones para la inserción laboral, coexiste con un posicionamiento de Figueroa frente a los intentos de avances del gobierno de Javier Milei sobre derechos y recursos de la provincia. En la semana, junto a todos los intendentes y la mayoría de los diputados de diferentes bloques, el gobernador firmó un acta compromiso en Defensa de Neuquén.

Con ese mismo empuje tomó la decisión de desactivar la bomba de tiempo que la gestión anterior había dejado en la caja jubilatoria del Instituto de Seguridad Social del Neuquén (ISSN), y lo hizo sin impulsar cambios en la edad jubilatoria. La suba en los porcentajes de aportes (personales y patronales) es parte de una estrategia que incluye la eliminación de las jubilaciones de privilegio y de los gastos innecesarios. El saneamiento era indispensable.

Estas y otras acciones, como la implementación del programa de becas, se dieron en menos de dos meses y en paralelo con la construcción de una estrategia patagónica, que reunió a los gobernadores en Villa La Angostura. Figueroa fue el organizador de ese pronunciamiento en defensa de la región, ante un escenario nacional a todas luces complicado.

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