El gas de Vaca Muerta busca su destino europeo

La criminal invasión rusa a Ucrania y la decisión de las naciones de la Unión Europea (UE) de no comprarle gas al país invasor, hizo que Vaca Muerta emergiera entre los posibles sustitutos. Tal es así que la misión de embajadores que -en inusual número- visitó la provincia durante la última semana, lo planteó sin más vueltas.

Eso y el hecho de que las producciones récord pueden decantar en un cuello de botella, llevan a una ecuación prácticamente ideal: Neuquén tiene lo que Europa está dispuesta a comprar, y eso coloca a la provincia y al país frente a un posible salto en lo que a las exportaciones a gran escala se refiere.

No obstante, hay un hecho no menor que obliga a trazar proyecciones a futuro, pero con las urgencias del ahora: la exportación no sólo requiere de ductos para transportar el fluido por el territorio nacional, sino también de una planta de licuefacción para pasarlo a su estado líquido. Y es precisamente eso lo que, este martes, volvió a plantear el gobernador Omar Gutiérrez.

Lo hizo durante su exposición en el Tercer Congreso Industrial del Consenso Nacional del Trabajo y la Producción, que se desarrolla en la ciudad de Buenos Aires. “Es necesario ponernos de acuerdo y consensuar un proyecto de ley que brinde amplia respuesta a lo que se requiere, para la inversión en una planta de licuefacción”, subrayó el gobernador y agregó que “hoy el mundo necesita lo que Vaca Muerta tiene y eso es el gas”.

Dijo que las  inversiones son fundamentales “para conectar, como lo venimos haciendo, a Vaca Muerta no sólo con la Patagonia, las regiones de la Argentina, Chile y Brasil, sino también con Europa; y para eso es muy importante avanzar con normativas modernas”. Reiteró que la exportación no afectará al camino rumbo al auto abastecimiento interno, sino que correrá por camino paralelo, con el consecuente ingreso de dólares a la economía nacional.