Ocurrió: Quintriqueo fue imputado por usurpación, y se entra en una fase distinta
Se había anticipado desde este medio que el lunes 20 no iba a ser un día más, pues el principal referente del sindicalismo estatal neuquino actual, Carlos Quintriqueo, debía concurrir ese día a una audiencia de formulación de cargos. Quintriqueo acudió, el trámite se cumplió, y el dirigente sindical de ATE del delito de "usurpación en calidad de coautor", que está previsto en el artículo 45 del Código Penal, y también en el 181. Es el primer paso hacia una fase distinta, entre lo judicial y su inevitable repercusión política, pues es muy posible que esa causa se unifique en poco tiempo más con otra vinculada al mismo hecho, pero que está caratulada como robo.
El hecho que provocó esta inédita acción judicial contra un destacado referente sindical (en Neuquén no es que haya un sindicalismo distinto, sino que está todavía más "protegido" que en cualquier otro distrito) fue el ataque e intromisión en instalaciones de Prima Multimedios, en abril de este año. En esa oportunidad, un grupo de adherentes de ATE, liderados por el propio Quintriqueo, ingresó, rompió y se llevó transmisores que permitían la puesta al aire de tres radios de este grupo.
Hasta ahora, ese hecho había sido condenado solo desde la retórica en defensa de la libertad de prensa, y esto, con cierta relatividad. Señalaron la gravedad de la situación tanto ADEPA como FOPEA, y el incidente fue reflejado en importantes medios periodísticos nacionales. "El avance de la Justicia en la investigación es trascendental para evitar esta habitual forma de proceder por parte de grupos de intolerantes", indicó el director de Prima Multimedios, Claude Staicos.
"Desde el grupo Prima continuamos informando sobre los temas de interés para los ciudadanos, ejerciendo la libertad de prensa y la democracia plena", sostuvo el directivo.
Después de este ataque sindical a Prima, hubo muchos más hechos violentos contra la prensa argentina. Resonó el ataque con bombas incendiarias a Clarín, y, más recientemente, la quema de instalaciones en la sede central del diario El Chubut. Antes, una patota sindical había ingresado a la sede central del diario Río Negro, destrozando el lugar e intimidando a quienes allí trabajan.
Es muy significativo que un dirigente sindical como Quintriqueo se someta a la Ley y se haga cargo de sus eventuales responsabilidades en hechos de violencia. Para que haya libertad de prensa, para que se ejerza realmente la libertad de expresión que consagra la Constitución Nacional, es fundamental que no haya impunidad para quienes la hayan atacado, con o sin conciencia de su importancia vital para la democracia argentina.
