El cartelito de cerrado trajo cola política
La decisión del gremio docente ATEN de fajar con carteles de “escuela cerrada” los establecimientos educativos, como una fase superior del largo conflicto que mantiene por puja salarial con el gobierno, provocó una denuncia penal y una ríspida intervención de Cambiemos, que aprovechó para acusar de una virtual inoperancia política al equipo de Omar Gutiérrez.
La denuncia penal la presentó el ministro de Desarrollo Social, Trabajo y Seguridad, Mariano Gaido, contra el gremio docente y por la actitud de cerrar escuelas, que deberían haber permanecido abiertas pese al paro vigente, que es por el lunes y martes. Políticamente, ni el gobierno ni el ministro innovaron en el discurso que han mantenido hasta ahora.
Cambiemos aprovechó la circunstancia sobre la base de lo previsible. Desde el propio Horacio Quiroga, pasando por Leandro López, el diputado nacional, y por Juan Monteiro, el legislador provincial, cada uno en su estilo y con sus propósitos, hicieron leña del árbol caído: la “tragedia educativa” que tanto gobierno como gremio parecen abonar en lugar de resolver.
