De Macri a Fernández, del glamour privado al lujo estatal

5 junio, 2020
De Macri a Fernández, del glamour privado al lujo estatal
VLA
VLA

La residencia oficial El Messidor, esa mansión comprada en el primer gobierno de Felipe Sapag, restaurada por el gobierno de Jorge Sobisch, y mantenida con cierta austeridad hasta el presente, será, según se ha informado, el lugar que albergará en Villa La Angostura al presidente Alberto Fernández.

Todo era afán y preparación este viernes esperando al primer presidente en mucho tiempo que se alojará en la residencia. El anterior, Mauricio Macri, visitó muchas veces Villa la Angostura, pero siempre se alojó en una residencia privada de Bahía Manzano, y les esquivó a los actos oficiales. Al único que fue, en Villa Traful, le dejó un recuerdo ingrato: apedrearon la comitiva y todo derivó en una causa penal con absolución posterior para dirigentes de ATE.

Fernández, en cambio, hará el circuito oficial. Del aeropuerto de Bariloche, a Villa; acto para inaugurar planta de tratamiento licitada por Cristina, terminada por Macri, y presentada por él; conferencia de prensa, firma de convenios, todo eso en el Centro de Convenciones. Después, sería la hora de la mítica residencia donde pasó sus días de presa tras el golpe del ’76, María Estela Martínez de Perón, más conocida como Isabelita. La presidenta que el peronismo quiere olvidar, pero que la historia mantiene caliente en el rescoldo de los desaciertos nacionales.

Allí se ha preparado una cena para selectos comensales. Como en Santa Rosa, La Pampa, se hizo un previsible asado, el plan era presentar un plato con trucha, uno de los componentes básicos de la gastronomía de Villa La Angostura. También se dijo que para el sábado al mediodía (el Presidente seguiría en El Messidor) estaba planificado un asado bien neuquino, con chivito como plato fuerte.

En fin. Los perfiles presidenciales han cambiado. Según el cliché nacional, se ha pasado de un neoliberal privatista a un populista estatal. Son clichés, simplificaciones de la realidad, que, no obstante, algo de realidad encierran. De cualquier manera, el nivel presidencial se mantendrá, lejos de la miseria generalizada. El protocolo difícilmente contemple la noción de nivelar para abajo.

No se mostrarán detalles: tal vez con eso, alcance.

Rubén Boggi

Te puede interesar
Últimas noticias