Inédita maratón de Gutiérrez por oficinas rosadas
Así como Alberto Fernández rompió récords de cantidad de ministerios en su organigrama gubernamental, el neuquino Omar Gutiérrez quebró antecedentes de fulgurantes y breves visitas a esos ministerios en la primera etapa de gestión.
Es muy evidente que el MPN busca tener máxima sintonía con la presidencia de Fernández. Para ello cuenta con una ventaja sobre las demás provincias y sus elencos gubernamentales: el desarrollo del abordaje de actualización "social", con temas como el género, la diversidad, y otras cuestiones de la coyuntura social, que la gestión de Gutiérrez comenzó a concretar hace cuatro años.
Esto, un poco por casualidad y otro poco por coincidencia ideológica, factor que se le debe, en buena parte, a Pablo Gutiérrez Colantuono, ha facilitado mucho esta primera etapa de aproximaciones. El MPN le apunta a lo social para pegarle al blanco principal, que sigue siendo Vaca Muerta. Es un rasgo de mucha empatía entre la versión emepenista y la neo-peronista de Fernández: revestir la política de inquietudes sociales, mientras se actúa en el desarrollo de la economía con una heterodoxia absolutamente pragmática.
La conexión entre el desarrollo productivo de la economía, y lo estrictamente social, ofrece en Neuquén un ejemplo arrollador: Neuquén creó en los últimos cuatro años 6.900 puestos laborales privados, cuando, en el mismo período pero a nivel nacional, se perdieron 229.100 puestos laborales.
Lo concreto es que el jueves Gutiérrez estuvo con Matías Lammens, de Turismo y Deporte; con Nicolás Trotta, de Educación; con Victoria Donda, del INADI; con Roberto Salvarezza, de Ciencia; con Eli Gomez Alcorta, de Mujeres; y finalmente con quien más seguramente le interesaba estar, con Martín Guzmán, Economía.
El despliegue maratónico es interesante en sí mismo, y muy evidente la intención. No hay otro gobierno provincial en Argentina que se haya dedicado tanto a recorrer las oficinas de la Casa Rosada, en tan poco tiempo.
