Cambia otra vez el escenario, con pelea Quiroga-Gutiérrez

16 junio, 2018
Cambia otra vez el escenario, con pelea Quiroga-Gutiérrez
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No hay un escenario de proyección segura en la política neuquina. Son muchas las variables no definidas todavía. Y va cambiando con relativa rapidez. En las encuestas, por ejemplo, aparece liderando Horacio Quiroga. Pero, como no está segura su candidatura, el MPN hace jugadas laberínticas, que incluyen su propia interna. Así, lo que dicen las encuestas actualmente ya exige una revisión. El escenario presenta un sutil cambio, y las maquinaciones no cesan.

Uno de los factores que juegan actualmente es el quiebre, que amenaza con ser definitivo, de relaciones entre el gobernador Omar Gutiérrez y el intendente capitalino. Esta ruptura, que va más allá de la natural competencia entre el MPN y Cambiemos, se acrecentó en su herida inquietante después de la sesión del Deliberante en la que la oposición, liderada por el partido provincial, se atribuyó con 11 votos un dos tercios discutible, para voltear el veto de Quiroga respecto de la “cláusula gatillo” para la tarifa del transporte.

Sobre eso, vino el martilleo sobre la quita de tributos municipales de la factura con la que CALF cobra su tarifa a los usuarios. Gutiérrez salió a florear su buena relación con el presidente Mauricio Macri, al destacar que él había quitado los impuestos (Ingresos Brutos) de las facturas de Camuzzi; mientras que el Intendente, que pertenece al mismo espacio político del oficialismo nacional, no quiere cumplir con el expreso pedido del Presidente. “Yo lo hago y él no”, dijo, en síntesis, Gutiérrez. Y Quiroga entendió que ya era la gota que rebasaba el vaso de su paciencia, que –como se sabe- no es mucha.

Por eso, el Intendente salió a machacar nuevamente con la “verdadera” intención del MPN, que sería la de contribuir a reducir los ingresos municipales capitalinos, para que la propuesta política que se sustenta en esa gestión, empiece a naufragar directamente desde la billetera. “Quieren quebrar al Municipio como quebraron la Provincia”, dice Quiroga. Y mientras dice estas cosas, muestra otros gestos, para nada ingenuos. Gestos que insinúan que puede jugar en la interna del MPN, que precederá, inevitablemente, a la contienda general en la Provincia.

Casualidad o no, invitación protocolar mediante, Quiroga visitó al senador nacional y líder petrolero, Guillermo Pereyra. Con él habló largamente. Para afuera, del motivo de la reunión, que fue el de recibir directamente los detalles de la construcción de la “ciudad sanitaria” que la mutual del poderoso sindicato levanta frente al aeropuerto Juan Domingo Perón. Quiroga prometió, ahí sí, presentar un proyecto para eximir del pago de tributos municipales a esa obra. Es un mensaje que encaja casi perfecto para los que tejen todos los días la infinita trama de las posibilidades para el 2019.

Esa trama comienza a bordarse este lunes, cuando se reúna la Junta de Gobierno que preside Gutiérrez, y fije la fecha para las internas de renovación de cargos partidarios, que será el 12 de agosto. La Lista Azul se presentará. Esa no es la cuestión, sino saber si acaso habrá alguna otra lista que le compita. Allí comienzan las especulaciones acerca de lo que hará la Azul y Blanca de Pereyra, por ejemplo. Algunos ya dicen que no se presentará, porque la idea es hacerle el vacío a Gutiérrez y su padre político, Jorge Sapag. En eso anda, por supuesto, el rebelde y federal, Rolando Figueroa. “A la única interna que nos presentaremos será a la de candidaturas para el año que viene” se afirmó esta semana. A la par, se admitía que las negociaciones para romper el núcleo duro del oficialismo emepenista incluyen movidas con “estrellas” del exterior del universo partidario.

“Así como Gutiérrez se siente seguro del apoyo de Macri, por lo menos en el sentido de que no joderá con competir realmente por el poder provincial, nosotros vamos a demostrar que también podemos jugar dividiéndole el campo de Cambiemos”, se escuchó.

En ese contexto de especulaciones, que incluyen diagnósticos médicos y teorías sobre imposibilidades, se reflota una teoría que existe desde hace por lo menos dos años, que discurre sobre una cuestión de reparto: asegurar la permanencia del MPN –que en definitiva no le molesta a Macri para su propia proyección, o la de sus herederos- en el gobierno provincial, mientras que al mismo tiempo se garantice la continuidad del Quiroguismo –sin Quiroga- en la Municipalidad capitalina.

Esa construcción especulativa, que se traduce en movimientos muy concretos y pragmáticos, se mete en la interna del MPN. Porque, para algunos, funcionaría con Gutiérrez presentándose a una reelección; y, para otros, funcionaría igualmente, o mejor, sin Gutiérrez. ¿Con Figueroa? Sí, como una opción que ha comenzado a hablarse seriamente, después de la irreversible pelea de Quiroga con Gutiérrez.

Los dos modelos posibles se trabajan paralelamente. El oficialismo Azul coquetea con esa posibilidad, y hasta tendría un candidato a intendente que no es emepenista. La delicadeza de la situación es tal, que produce amagues importantes. Por ejemplo, lo del juicio político a Monzani, que una fuente importante del gobierno le juró a este periodista, presentaría Alejandro Nicola, no se concretó. Se consideró, tal vez, que era demasiado y no convenía, y que bastaba con hacerlo correr como una advertencia.

Como sea, el cambio de escenario es constante. No hay descanso en el tejido de la trama. Habrá más cambios en el semestre, es casi seguro. En el tembladeral de la coyuntura, es lo único que puede vaticinarse.

Rubén Boggi

 

 

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