2016-12-25
¡Felices Fiestas en el reino de la incertidumbre lumínica!
Dios proveerá, dijo algún (mal) iluminado hace mucho tiempo en este país, y desde entonces vivimos de apagón en apagón cuando llega el verano y se encienden los acondicionadores de aire en procura de mitigar el calor del infierno en el que vivimos.
¡No hay que deprimirse! ¡Se soluciona con velas, linternas y luces de emergencia que se venden en los supermercados a precios accesibles!
Eso sí: mientras avanza a tientas buscando el arbolito de Navidad, no se olvide de putear a los que estuvieron antes.
Seguro que tienen la culpa.
Te puede interesar