Entre el camino de Santiago y la grotesca realidad

Se exhibió en la tarde del jueves la película con formato documental El Camino de Santiago, la realización de Tristán Bauer, con guión de Omar Quiroga y Florencia Kirchner. Narra lo sucedido, o un recorte de lo sucedido, con la desaparición y muerte de Santiago Maldonado.

La exhibición se hizo en el auditorio del Museo Nacional de Bellas Artes, y hubo una invitación a concurrir expresada por ATEN. A la convocatoria acudieron algunos políticos. En la foto que ilustra esta nota, se ve, por ejemplo, a la dirigencia de UNE, sentadita en fila en las cómodas butacas del auditorio.

Pero otros sectores no estuvieron de acuerdo, ni con la película ni con la proyección ni con casi nada. Así, se hizo una “intervención artística” a la entrada del Museo, por un grupo anarquista. El episodio terminó con una rápida razzia policial que detuvo a ocho de los artísticos manifestantes, y los llevó a la Comisaría Segunda.

Allí se congregaron rápidamente defensores de la libertad a ultranza, y, curiosamente, el sector de ATEN que discrepa con la conducción provincial del gremio docente. Estuvo Angélica Lagunas, la diputada y secretaria general de la seccional capitalina de ese gremio, denunciando el hecho y dejando constancia que el sindicato (provincial) había llamado a ver esa película que hace “un uso kirchnerista” de “la desaparición y posterior asesinato” de Maldonado.

Entre los que estaban adentro del auditorio, los que estuvieron afuera, la película en su propia existencia físico-virtual, y la policía neuquina, integraron un coro desafortunado y grotesco, que en Argentina solemos denominar “realidad”.