Macri, la Vaca, y el "primero hay que saber sufrir"

Mauricio Macri estuvo en Vaca Muerta. En Loma Campana, territorio comandado por YPF-Chevron, para ser específicos. Allí, hizo lo que había anticipado este diario: defendió la política tarifaria, sin subsidios estatales, aplicada por su gestión. Grabó un spot que fue inmediatamente transmitido en los principales canales de televisión de Buenos Aires. Porque estaba dirigido centralmente a esa ubicación geográfica. Donde vive la mayor cantidad de habitantes del país, donde más se queja la gente por los tarifazos.

La movida de Macri tuvo como correlato en la estrategia de Cambiemos los anuncios de la gobernadora de Buenos Aires, María Eugenia Vidal. La principal socia del Presidente le quitó impuestos a las tarifas de energía, y con eso producirá una rebaja considerable. El Presidente quiere que los demás gobernadores hagan lo mismo. Es una apuesta política fuerte, a la que le seguirá inmediatamente un pedido de compensación, por el esfuerzo, de no pocos gobernadores, antes de acceder a la demanda.

[caption id="attachment_56608" align="aligncenter" width="500"] Gutiérrez (aquí, tapando a Quiroga) saluda a Macri en el aeropuerto capitalino. Miran Marcelo Bermúdez y David Schlereth.[/caption]

Macri llegó al aeropuerto capitalino y fue recibido por el gobernador Omar Gutiérrez y por el intendente Horacio Quiroga. En el reino de las sonrisas perpetuas, las ceremonias protocolares ocurrieron con la velocidad de un rayo. El Presidente se subió rápido al helicóptero, junto con el presidente de YPF, Miguel Gutiérrez, el ministro de Energía, Juan José Aranguren, y el mandatario provincial, que por las dudas había llevado su propio helicóptero al aeropuerto.

En Loma Campana todo ocurrió según lo rigurosamente planificado. Recorrida, grabación de spot, almuerzo con operarios y funcionarios, las previsibles muestras de interés en los procesos de extracción no convencional, la puesta en escena perfecta para hablar de lo que cuesta sacar el gas de las profundidades de la tierra y el “cambio cultural” que deberán hacer los argentinos para entender, después de años de tenerlo casi regalado, que el gas es caro y que hay que pagarlo si es que se quiere tener lo suficiente.

[caption id="attachment_56609" align="aligncenter" width="500"] La foto de rigor, con mamelucos, en la recorrida por Loma Campana.[/caption]

Las protestas ante su llegada fueron mínimas. Un grupo de mujeres en San Patricio del Chañar que intentaron bloquear la ruta y que fueron demoradas. Son mujeres relacionadas con el trabajo petrolero que fue coyunturalmente desactivado y que siguen reclamando ese lugar, para sí o para sus maridos. En el aeropuerto, quedó un grupo de ATE que cumplió el rito de repudiar a Macri.

Quedará como testimonio de la primera visita a Vaca Muerta del Presidente, sus argumentos grabados para el mensaje televisivo acerca del porqué de los aumentos tarifarios. Su intención de hacer ver que entiende el sacrificio popular, pero que no había otro camino, en función de tantos años de políticas que juzga equivocadas.

Como en aquel tango de los hermanos Expósito, Macri le dijo al pueblo argentino, en estricta referencia al gas que enciende en calefactores, termotanques y cocinas, que “primero hay que saber sufrir”.

Rubén Boggi