Tendrán que indemnizar a familia de un niño muerto en la ruta

17 abril, 2018
Tendrán que indemnizar a familia de un niño muerto en la ruta
auto quemado
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La Sala Segunda de la Cámara Civil de Apelaciones de Neuquén revocó un fallo de primera instancia que responsabilizaba a un niño de 12 años por el accidente de tránsito que le costó la vida; y condenó a los automovilistas a indemnizar con 550 mil pesos e intereses a sus familiares.

El fatal accidente ocurrió alrededor de las 14:30 del 18 de agosto de 2013. Ese maldito domingo, Rodrigo C. intentó cruzar la Ruta 22, a la altura de la calle Winter. Es decir a dos cuadras de la Bahía Blanca, en pleno casco urbano de la ciudad de Neuquén.

Los peritos lograron establecer que lo hizo por fuera de la senda peatonal, y que llegando al guardarrail que separa ambas manos, retrocedió e intentó volver sobre sus pasos.

Con tanta desgracia, que fue atropellado por un Citroen C3 que lo lanzó, literalmente, hacia el carril exterior en el que fue embestido por un Chevrolet Astra. Este último impacto fue el que le produjo la muerte.

Un juzgado había rechazado la demanda con el argumento de que la responsabilidad era exclusivamente del niño, por no haber cruzado por la senda peatonal.

Pero sus familiares apelaron con el argumento de que esos vehículos circulaban a más de 80 kilómetros por hora en una zona en la que no debían superar los 60. Y, ahora, la Sala integrada por los jueces Patricia Clerici y Marcelo Medori atribuyó la responsabilidad por partes iguales (50% para la víctima y un 50% para los conductores), y ordenó el resarcimiento.

En su apelación, la familia expuso que, en lugar de brindarle asistencia al niño al que le había pasado por encima, el conductor del Astra se dio a la fuga. Tal es así que recién pudo ser ubicado muchas horas después del siniestro. En su fallo, los jueces indicaron que la imprudencia es más de los padres y familiares que permitieron que un niño de 12 años cruzara solo una ruta peligrosa, que del propio menor.

Afirmaron que, efectivamente, la conducta del niño ha sido la causa del accidente; pero concluyeron que también influyó la conducta de los automovilistas, ya que circulaban a una velocidad sensiblemente superior a la permitida, en cercanías de un cruce peatonal.

“De haber circulado a una velocidad precautoria, hubieran podido evitar el impacto, o éste ser de menor entidad”, dijeron los magistrados.

El accidente ocurrió justo en el Día del Niño. Las crónicas de aquella jornada dan cuenta de que, enardecidos, familiares del niño atacaron a los autos que participaron del accidente y prendieron fuego el Citroen. Y que, al ver lo que ocurría, el conductor del Astra escapó del lugar y se dirigió rápidamente a la Comisaría Quinta de Centenario, donde se presentó y contó lo que había sucedido.

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