Un acta firmada por ministros en el limbo
La fotografía muestra las firmas del acta concretada este lunes en el obispado entre ATE, el Gobierno, la Iglesia, y el defensor del Pueblo capitalino. Como se ve, pocos aclararon la firma y mucho menos el cargo. Es que el acta conciliadora tiene una singularidad tremenda.
La singularidad consiste en que asistieron representantes del Poder Ejecutivo que a las horas de firmarse el acuerdo, no se sabía qué cargo representaban, ya que el organigrama ministerial en el que se habían desempeñado Cristina Storioni y Mariano Gaido ya está fuera de circulación, y el nuevo, todavía no fue anunciado en lo que hace a distribución de estos cargos que desempeñarían los nombrados.
Claudio Domínguez, por otra parte, es diputado provincial, del bloque del MPN. Sin embargo, el acta lo nombra como “representante del PEP”, es decir, del Poder Ejecutivo Provincial. ¿Tendrá algún cargo en el a estas horas todavía desconocido esquema en lo que a nombres se refiere, o es simplemente una desprolijidad?
Esto es así de concreto. Los representantes del PEP estaban, al menos en lo que a conocimiento público se refiere, en el limbo. Un lugar en donde se aposentan las almas, no los funcionarios de gobierno.
