El Municipio carga tintas sobre el EPAS por las roturas en calles

Dentro del plan de reparación de las calles pavimentadas de la capital neuquina, se enfatizó este sábado en las numerosas reparaciones que tuvieron que hacerse “por pérdidas de agua potable y roturas por parte del EPAS”, según dijo el subsecretario de Mantenimiento Vial, Juan Manuel López Osornio.

“El miércoles arreglamos un bache en la intersección de Río Quinto y Alderete pero la reparación duró menos de 48 horas porque el agua está corriendo de nuevo cuando la cañería había sido supuestamente arreglada por el organismo provincial”, lamentó el funcionario.

“Las calles se rompen y los arreglos no duran”, destacó, y puso de ejemplo la rotura en Lanín y  Avenida Olascoaga, que dejó el EPAS por la obra de la Colectora Central Máxima: “esperaremos una semana para hacer los arreglos porque en este sector es necesario hacer una intervención compleja por el volumen de ejecución, y por tratarse de dos arterias muy transitadas”, sostuvo.

En cuanto a las intervenciones que forman parte del cronograma habitual de trabajo, el funcionario indicó que se hicieron reparaciones en bacheo en las calles Barrera y Arabarco, Barrera y Combate de San Lorenzo, Paranacito y Manuel Rodríguez, Salto Grande 2.500, Rohde y Avenida del Trabajador, Las Gaviotas y Avenida del Trabajador, y Galarza 2.900.

En función del relevamiento efectuado por personal a su cargo, se efectuarán aperturas de calzadas en los barrios Gregorio Álvarez y Melipal extendiéndose a distintos tramos de Primero de Mayo, Calle 38, Cipolletti, Avenida Huilén, Neuman, Collon Cura y Picún Leufú, entre otras.

En Rohde y Avenida del Trabajador los trabajos se ejecutaron en hormigón mientras que en el resto de la ciudad las reparaciones “se hicieron en asfalto, por lo que apenas concluidas fueron liberadas al tránsito”, dijo López Osornio.