Dos policías fueron acusados por defraudación
Dos policías de Neuquén quedaron formalmente acusados por los delitos de defraudación por abuso de confianza, al haber simulado cargas de combustibles para patrulleros fuera de servicio o directamente inexistentes.
El episodio está considerado como un "escándalo” dentro de la fuerza provincial.
El fiscal Marcelo Jara, titular de la fiscalía de Delitos Patrimoniales, acusó a los policías Carlos Gómez y Ariel Poblete de haber defraudado a la administración pública en agosto de 2015. Según Jara, la maniobra consistió en fraguar cargas de combustible en una estación de servicios ubicada en calle Belgrano, a móviles que se encontraban fuera de uso. En otros casos, se supo que directamente eran móviles inexistentes.
Para poder cumplir con esa maniobra, se valieron de la confianza que les habían depositado sus superiores jerárquicos y en su calidad de funcionarios policiales que se desempeñaban en el área despacho de combustibles de la Policía neuquina.
Jara dijo, en la audiencia que dirigió el juez Gustavo Ravizzolli, que los policías "acordaron y procedieron a consignar falsamente en las planillas de cargas el despacho de combustibles a móviles policiales que se encontraban fuera de servicio, como así a consignar una cantidad mayor de litros de la carga”. Lo hicieron "al confeccionar de manera manual el gasto de expendio, tanto en las denominadas cargas diarias que se realizaban entre las 8 y las 13, como también en las denominadas cuadrículas, cuyo horario es de 0 a 2”, detalló Jara.
Agregó que "se ha comprobado que como resultado de la maniobra descripta, el perjuicio a la administración pública alcanzó la suma de 80.443 pesos”.
El delito que se les imputa es el de defraudación por abuso de confianza doblemente agravado por ser cometido por un funcionario público y ser en perjuicio de la administración pública, en calidad de coautores.
